Lunes
Manual de instrucciones para el hombre.
La
mayoría de los hombres desean que su pareja se vuelva loca entre sus
brazos, pero mucho de ellos no se dejan aconsejar y, a veces, se
inventan lo que su pareja tiene que sentir y se "mosquean" cuando las
cosas no suceden como se imaginan.
1. No te enfades.
El que una chica te invite a leer resto no quiere decir que no le guste
"como se lo haces" o que quiera restregarte que "como se la hace ella
no se lo hace nadie". ¡Todo lo contrario! Lo importas tanto que te está
haciendo el mejor de los regalos. Unos consejo para que te vuelvas
irresistible no sólo con ella sino con todas las mujeres que encuentres
en tu camino. Hoy este mensaje le favorece a ella pero cuando se aprende
a hacer bien una cosa sirve para siempre. Agradece el detalle y
compórtate como un alumno aplicado. Y sobretodo no te olvides de
practicar, tanto si tienes confianza como si no, pregúntale y escucha lo
que tiene que decirte. Si vuestra relación ya esté consolidada puede
que queráis leer esto juntos y paso a paso ir descubriendo de que estoy
hablando. Pero si no te atreves a decir nada no te preocupes échale
empeño e imaginación y sobretodo aprende de tus errores sin desanimarte.
Nadie se hace maestro en unas pocas lecciones.
2. No nos gusta "ir al grano".
Creo que este primer consejo es el más importante: "A las mujeres no
nos gusta ir al grano". Vuestro principal problema en esto del sexo es
que creéis que somos iguales y que nuestra sensibilidad erótica está
(como la vuestra lo más cerca posible de los senos y los genitales y por
ello vuestras principales caricias son en estos lugares, pero para las
chicas las zonas eróticas más importantes son, precisamente, las que más
alejadas están de esas zonas. Si quieres que se derrita desde el
principio, no le toques ni los genitales ni los senos, acaricia
suavemente su nuca. Pasa tu mano por su espalda (sin llegar a los
glúteos, y si llegas allí ni se te ocurra darle una palmada). Detente
con suavidad en los hombros, y sobretodo háblale bajito y mírale a los
ojos. Una caricia muy emocionante y que abre la puerta al sexo es rozar
tu mejilla con la suya, mientras la mantienes abrazada junto a tu
corazón. Las mujeres somos muy románticas y estamos intoxicadas de
educación sentimental. Juega esta baza y ganarás.
3. El cuello y las orejas.
Las orejas y el cuello desde estas hasta los hombros son lugares muy
excitantes, si los tratas bien habrás conseguido la mitas de la
victoria. Los hombres sois visuales, por eso lo que más os pone son las
cosas que os entran por la vista, pero los mujeres somos mucho más
auditivas, no gusta cerrar los ojos y dejarnos llevar por los oídos.
Tienes sus orejas al alcance de tu boca, aprovecha y habla. Cuéntale lo
que la quieres, lo que te gusta, lo que te pone o lo que le vas a hacer.
Si no la conoces muy bien no uses palabras gruesas hasta que no estés
seguro de que le gustan y tampoco es bueno usar interrogaciones. Lo
mejor es que te dejes llevar por la emoción del momento y si no se te
ocurre nada busca una palabra romántica y bonita como: estrella, lucero,
cielo, amor, nena, cosita, chiqui etc. y repítela en todo los tonos
posibles cuanto más bajito mejor. Después besa su cuello con suavidad,
no los hagas con fuerza porque sobre la clavícula pasa la arteria que
lleva el oxigeno a la cabeza y si presionas con fuerza pude marearse o
desmayarse y no de amor precisamente.
4. La espalda.
La espada es una zona muy importante como zona erógena, pasa las manos
por ella, al principio abarcando grandes superficies, y después poco a
poco céntrate en las partes más huesudas, la columna y las costillas,
acarícialas con fuerza como si tocaras un instrumento, abárcala con los
dos brazos y aprieta su cuerpo contra el tuyo, puede que ya tengas el
pene erecto pero todavía no es el momento de mostrarlo o de que ella lo
note, este momento es para el cariño, todavía no hemos llegado al sexo.
La espalda también es un buen apoyo si te acercas por detrás. Rodéala
con tus brazos por la cintura sin tocar los senos y acúnala suavemente.
Recuerda que los gestos de la ternura y los gestos del sexo son los
mismos; los hombres entran en el sexo a través del sexo y las mujeres
entran en el sexo a través de la ternura.
Martes.
Los besos.
Para
los humanos los besos son una de las manifestaciones más espontáneas de
cariño. Nos besamos continuamente los unos a los otros y para expresar
las cosas más diversas pero besar bien en la cama es muy importante.
5. Besitos suaves.
Parece que la estrella de los besos son los que se dan en la boca pero
hay otros mucho más eróticos, son los que sorprenden, lo que no se
esperan. Los que se dan con suavidad en lugares insospechados como: la
raíz del pelo, las sienes la nuca. Durante la época dorada de Hollywood,
cuando el escuadrón de la moral campaba por los guiones de todas las
películas, estaban prohibidos los besos "húmedos" y que duraran más de
tres segundos. Hichskok salvo estas prohibiciones creando el beso más
largo y más erótico de la historia del cine, se lo da Gary Grand a
Ingrid Bergman, dura minuto y medio y consiguió superar la censura
porque son miles de pequeños besos en la comisura de los labios que
ponen a cien a todos los espectadores de esta película.
6. En las manos y los brazos.
Seguimos hablando de besos. Esta vez es Rodolfo Valentino el que
inventa un beso que volvió loca a toda su generación de mujeres, Es un
beso en la muñeca cerca de la palma de la mano, este beso pudo de moda
perfumarse precisamente en este lugar. Empieza por besa la palma, sigue
por los dedos, mordisquea las yemas y desliza tu boca hasta la muñeca
entretente un poco en este lugar, después continua a lo larga de la cara
interna del brazo hasta el hueco del codo, mientras besas puedes jugar
también con la lengua y sigue por el antebrazo hasta la axila, es un
lugar muy erótico y con un olor muy agradable, tanto es así que algunos
hombres desean imitar un coito en este rincón tan calido, sensible y
húmedo del cuerpo de su pareja.
7. Chupetones y lametones.
La piel se excita con mucho facilidad cuando nota la diferencia de
temperatura y tú tienes a mano un truco excelente, se trata de acariciar
primero, lamer después y chupar a continuación, los mejores lugares
para esta técnica son la espalda, los hombros, al abdomen, la cara
interna de los muslos. Otra práctica muy extendida y que pude leerse en
el Kamasutra, es el chupetón o lucho, consiste en succionar un buen
troza de piel y seguir haciéndolo hasta que la sangre llegue a los
poros, esto produce un cardenal especial que todo el mundo reconoce, en
el Kamasutra se usa para "marcar" a la persona con la que se mantienen
relaciones, para que todo el mundo sepa que tiene un/a amante, por eso
recomienda que se haga en un lugar visible pero inaccesible. Yo creo que
este tipo de marcas hay que pactarlas y respetar la voluntad de las
personas.
8. Mordisquitos.
Abrasiones. Morder es tomar una parte de la piel de la chica y apretar
sin mucha intensidad es una técnica que aumenta la tensión sexual. Hay
incluso personas que dicen en un mordisco pequeño en el hombro durante
el orgasmo intensifica este y lo hace inolvidable, pero no lo uses
indiscriminadamente. La abrasión consiste en lijar suavemente ciertas
zonas del cuerpo para hacerlas más sensibles al roce, se suele realizar
con limas de uñas, cepillos de dientes o lijas de madera suaves. En
general las abrasiones producidas por estos objetos son menos graves que
las que se producen en la piel por el roce de una alfombra. Es este un
juego divertido que podéis compartir, sólo un consejo más: debes elegir
para estas prácticas zonas que no estén sometidas posteriormente a roce
o a presión y los objetos que uses procura que estén muy limpios.
Miércoles.
Hoy
vamos a continuar donde lo dejamos ayer, recuerda que a las mujeres no
nos gusta que vayáis al grano, que somos muy románticas y que nos gustan
las sorpresas pero no las dolorosas.
9. Glúteos. Son
músculos muy grandes y fuertes, los usamos para equilibrar el cuerpo al
correr y son uno de los lugares donde se fija la vista para evaluar el
atractivo sexual tanto en hombres como en mujeres. Como son una gran
masa muscular tienen un montón de posibilidades eróticas y responden muy
bien a la caricia, pero acuérdate de llegar a ellos después de haber
quemado las otras etapas, no entres de principio si no quieres sentir el
rechazo de tu compañera. Puedes acariciarlos estando de pie, para ello
tómalos con tus dos manos y amasa con fuerza, tirando hacia arriba como
si quisieras levantar a tu chica en vilo, y si puedes hazlo. También
puedes empezar a "entrar en harina" bajando la mano hacia la cisura
superior de los muslos y deslizarla por entre estos hasta cerca del ano.
10. Muslos.
Otra zona erógena que hay que dejar hasta el final es la cara interna
de los muslos. Esta caricia es mejor hacerla cuando ya estéis
cómodamente tumbados y ya os hayáis quitado toda la ropa. Leva tu mano
desde la rodilla hasta el monte de Venus, si ella abre los muslos
continua, pero si los cierra o permanece quieta no subas más, limítate a
acariciar la fina piel de esa zona con energía al principio y luego
cada vez más suave hasta terminar haciendo cosquillas o pequeños
rasguños con la yemas de los dedos o las uñas sin apretar demasiad. Si
esta boca abajo también puedes acariciar esta zona deslizando las manos
desde los glúteos metiéndolas con lago de energía entre los muslos pero
sin llegar a la zona genital.
11. Abdomen. Al abdomen,
"El cantar de los cantares", (un relato porno que se coló en la Biblia)
le llama montón de trigo y como tal parece con su botoncito en medio,
está entre los senos y los genitales y es un buen preámbulo para ambos.
Muchas mujeres no se siente a gusto con su tripita, y prefieren que no
se haga hincapié en ella, si notas que la esconde o que se endurece bajo
tus manos no te entretengas demasiado acariciando y pasa directamente a
los besos y las caricias con la boca, como la piel de esta zona es muy
elástica se pueden tomar con loa labios trozos de piel y moverlos como
haría un perro con una presa, es un juego que si haces el ruido de un
perro puede resulta muy divertido.
12. Senos.
A pesar de lo que se cree lo senos no están ahí ni para hacer bonito ni
para dar de comer a las crías. Están ahí para provocarte, para
despertar tu deseo. No seas bruto y ni se te ocurra morderlos con
fuerza, pellizcarlos o golpearlos. Sobretodo los pezones son muy
sensibles y debes de aprender a tratarlos bien. Acarícialos con la palma
de la mano de arriba a abajo, chúpalos aumentando la intensidad, y
sobretodo no te concentres sólo en los pezones, acaricia también la
parte de los senos donde se unes al torso y amásalos con suavidad con
las dos mano o intenta meternos en tu boca. Toma uno de los pezones
entre tus dedos índice y corazón y muévelos hacia dentro si notas que su
respiración se acelera no dejes de acariciar, si te vas a otro lado lo
que podría ser un orgasmo no llegara nunca.
Jueves.
La cueva sagrada, pasito a pasito.
Si
has llegado hasta aquí, no pases más adelante si ella no te lo pide de
alguna manera, con sus gestos o con sus jadeos. Ahora llega el momento
de las manos, de la boca y de la lengua. Ella está sin ropa interior y
con las piernas abiertas.
13. El monte de Venus.
Recuerda lo que te he dicho no entres a saco, entretente un poco en la
barriguilla, bésala, lámela o recórrela con tus dedos. Entretente en su
ombligo, con cariño. Baja hasta la zona del monte de Venus, si tiene
pelo ni se te ocurra tironearlo, es muy sensible y este gesto es muy
desagradable, besa por los alrededores. De momento nada de vulva, Haz
que lo desee, que te lo pida… que sea ella prácticamente la que te
indique con su gestos o arqueando la espalda por donde quiere que
empieces.
14. Como llegar al tesoro. Ya has llegado
hasta la vulva, empieza a lamerle los labios mayores y el periné. Te
vas acercando al punto deseado, Separa bien los muslos, algunas mujeres
se mueren de gusto sólo con este gesto, y, con los pulgares, abre la
concha de tus deseos. Tus manos están ocupadas así es que llega el
momento de la lengua: acaricia con su punta la zona del clítoris,
algunas mujeres lo tiene tan sensibles que no toleran una caricia
directa, estate atento y si notas un respingo deja el clítoris y pasa la
lengua a du alrededor haciendo un circulo Por más ganas que tengas ni
lo succiones ni lo frotes de momento.
15. El clítoris y sus guardianes.
Un buen cunnilingus no consiste en succionar el clítoris, como si fuera
un pene, hasta llegar al orgasmo, además de su zona sensible hay otros
lugares muy importantes y que te conviene conocer y tratar. Lo primero
es no descuidar los alrededores en los que hay más terminaciones
nerviosas que en las del propio clítoris, en segundo lugar está el resto
de la zona interior de la vulva incluida la uretra y el orificio
vaginal, ellos también tiene derecho a recibir la visita de tu boca y
cuanto más piel acaricies más contenta quedara ella. Te propongo un
juego muy gustoso dibuja con la punta de la lengua un ocho tantas
veces como lo desees. Y ahora otro escribe con la lengua un mensaje como
por ejemplo "te quiero", le costará un poco descifrarlo pero podéis
echaros unas risas.
16. Técnica de los cuatro dedos.
Ahí esta la entrada de la vagina deseando ser penetrada, todas las
terminaciones nerviosas de la vagina se encuentran en esta entrada,
puedes darle un placer muy intenso si estimulas esos poco centímetros de
piel y no necesitas entrar demasiado, para ello tu lengua tiene que
tener vocación de pene e intentarlo, te dará un gran placer a ti
también. Pero tiene un inconveniente que es muy cansado y puedes
terminar exhausto y con dolor de lengua, por ello te propongo para
terminar y si tu pene no está preparado, la técnica de los cuatro dedos:
coloca la mano de perfil con el dedo gordo hacia arriba, mete los
dedos: índice, corazón y anular en la vagina y te darás cuenta que el
gordo queda a la altura del clítoris, ahora empieza a mover el brazo
desde el codo. Empieza muy suavemente y termina con la intensidad que
marque su respiración.
Viernes.
Usa la fantasía.
El
sexo no es sólo cuestión de técnica, precisa también de sentimientos.
Ya has conseguido llevarla al orgasmo, incluso puede que hayáis tenido
unas relaciones coitales estupendas, pero no serán satisfactorias del
todo si "el después" no es bueno. Hoy vamos a hablar de ese después. Y
de algunos antes.
17. Hablar, la música. La mayoría de
los chicos cuando llegáis al orgasmo entran en vuestra sangra tantas
endorfinas y tan de golpe que se os nubla la mente y caéis en sueño
profundo casi inmediatamente. El problema principal es que a las mujeres
no nos pasa lo mismo, nuestras endorfinas suelen llegar poco a poco y
durante un cuarto de hora, de tal modo que lo que sentimos después del
orgasmo es un subidón de energía, y lo que deseamos es hacer algo,
aunque sólo sea permanecer abrazados susurrando tonterías. Si tu eres de
los que tienes la costumbre de saltar de la cama para lavarte porque no
te gusta hacerlo sucio, ¡olvídate! Ninguna de las secreciones sexuales
con sucias y se puede dormir tranquilamente con ella, pero tu chica
necesita hablar, escuchar música, hacer risas durante unos diez minutos,
Si lo haces así la sesión será inolvidable para ella. Si te duermes
limpito no te lo perdonará en la vida.
18. Películas.
Pude que te estés preguntando como hacer para que tu chica quiera sexo.
Es esta una pregunta de difícil contestación, por eso voy a hacer
algunas sugerencias y si no funciona ninguna habrá llegado la hora de
invitarla a tomar café a un lugar agradable y silencioso y hablar de lo
que está pasando en vuestra vida sexual. Las pelís-porno funcionan
igualmente bien en hombres como en mujeres no creas eso de que el porno
es para chicos y que no se hace porno para chicas, es una leyenda
urbana, películas como Emmanuel o El Imperio de los Sentidos, son
excitantes para ambos sexos aunque puede que no nos excitamos con las
mismas cosas. Prepara una sesión de pelis porno, junto con algo de picar
y una bebida suave, el vino blando fresco o la sangría van muy bien,
no te pongas intenso se trata de que sea ella la que se insinué. Tu sólo
ayúdala a que se ría.
19. Inventa tus propios cuentos.
A veces la mejor pornografía esta en nuestra imaginación. Tengo un
amigo que dice que lo que más le pone es calentar a una mujer sólo
hablando él lo llama el "coito oral". Prepara las cosas para una tarde
agradable, puedes prepárale un baño oloroso y enjabonarle la espalda
mientras le cuentas un relato que te acabas de inventar, si no tienes
mucha imaginación busca los libros de cuentos de la colección "La
sonrisa Vertical" y plagia sin consideración. Poco a poco mientras estás
hablando sigue acariciando cada vez con más intención, si la notas
receptiva sigue hasta donde te deje pero si notas que se pone envarada o
que te rechaza, hazte el tonto y continua frotándole la espalda, si lo
haces bien, el agua caliente será tu mejor aliada.
20. Juegos eróticos. A veces la rutina se instaura en vuestra visa sexual y no se sabe como salir, es una pendiente cuya palabra clave es: PEREZA. Da pereza empezar, te lo haces mejor tú sólo y puede que a ella le esté pasando lo mismo. Para romper el círculo vicioso de la pereza te propongo algunos juegos. EL DESCONOCIDO/A. Cítala en un bar o lugar de copas que le sea desconocido, espera a que llegue y empieza a coquetear como si no la conocieras, se trata de emplear todas tus armas de seducción con ella como se fuera la desconocida más apetecible. CAMBIO DE ROLES. Para este juego tenéis que poneros de acuerdo. Buscad bastante tiempo, por ejemplo todo un fin de semana, durante el cual tú harás de ella o de una mujer, para ello te vestirás y harás las tareas de le corresponden a ella, y ella se disfrazará de ti y se comportará como tú o como un hombre. Hacedlo y aprenderéis mucho el uno del otro.
© Pilar Cristobal 2022